(Adaptación del original)
Lucha pacíficamente con tu respiración.
Inhala a los rescatistas y los escombros, exhala edificios intactos y bandadas de aves hermosas.
Inhala a los terroristas y exhala niños durmiendo en paz y campos frescos recién sembrados.
Inhala confusión y exhala árboles de maple.
Inhala al derrotado y exhala amistadas entrañables de toda la vida.
Lucha pacíficamente con tu escucha, oyendo las sirenas y orando en voz muy alta.
Recuerda tus herramientas: semillas de flores, ganchos de ropa, ríos limpios, preparar la sopa.
Recuerda hacer música, aprender la palabra gracias en tres lenguajes, aprender a tejer y hacer un sombrero.
Piensa en el caos como si fuera una danza, imagina el dolor como la exhalación de la belleza, o el gesto de un pez que nada hacia la otra orilla.
Lucha pacíficamente
Nunca antes el mundo se ha visto tan fresco y precioso.
Toma una taza de té y regocíjate.
Actúa como si el acuerdo de paz ya hubiera llegado.
No esperes ni un minuto más.